¿Más que una máquina "verde"? El coche eléctrico en Europa
2020 ha sido un año importante para el mercado de automóviles eléctricos, pero de una manera diferente a la que los analistas de la industria podrían haber esperado.
A consecuencia de la pandemia de COVID-19, la industria automotriz se enfrenta a un período de incertidumbre. Pero si bien el coronavirus puede causar una disrupción significativa en el sector, también puede alentar a los fabricantes a pensar más profundamente sobre cómo comercializan y venden autos eléctricos, para ir más allá de resaltar las ventajas ambientales de éstos y enfatizar su valor práctico.
En el primer y segundo trimestre de 2020, YouGov llevó a cabo una investigación sobre coches eléctricos en nueve países europeos: Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Noruega, España, Suecia y el Reino Unido. Los datos revelan que la mitad (51%) de los consumidores piensa que, el medio ambiente es una razón para comprar un automóvil eléctrico, pero también muestra que solo el 6% de los encuestados piensa que los beneficios ecológicos por sí mismos son razón suficiente para adquirir uno de los vehículos.
Para los fabricantes, que están migrando hacia la fabricación de vehículos eléctricos, una idea a tener en cuenta es que un tercio (35%) del público cree que los autos eléctricos no funcionan tan bien como sus contrapartes de gasolina, mientras que un poco más de uno de cada cinco (22%) cree que funcionan mejor.
Los coches de gasolina y diésel tienen una ventaja considerable. Para persuadir a los consumidores ambivalentes, los fabricantes de automóviles podrían considerar investigar qué previene y fomenta la compra de automóviles eléctricos en la medida que la industria se adapta a las consecuencias de la crisis.
¿Qué frena a los europeos a cambiar a eléctrico?
Nuestra investigación descubre que el precio fue la barrera más comúnmente esgrimida para comprar un automóvil eléctrico. Más de las tres quintas partes (62%) de los europeos están preocupados por el costo inicial, que no obstante, varía según las exenciones fiscales y los incentivos disponibles en cada mercado nacional.
Estos incentivos no siempre están estructurados de la misma manera. En Suecia, los propietarios reciben una "bonificación climática" de 60.000 Coronas, aproximadamente 6.000 €, seis meses después de registrar su vehículo, que funciona más como un reembolso que como una exención del IVA u otro descuento, lo que puede explicar por qué muchos suecos (63%) consideran el precio como una barrera para la compra. También puede haber problemas de comunicación en torno a los incentivos: una cuarta parte (26%) de los europeos sugiere que la falta de claridad sobre las ventajas financieras de los coches eléctricos fue un obstáculo.
Casi tres quintos (58%) también ven los problemas de duración de la batería como una barrera, el 53% cita puntos de carga limitados y casi un tercio (32%) hace referencia al costo de carga en casa. Al igual que con los incentivos, el coste varía mucho según el mercado. En España, la consideración del coste de la electricidad es más alta que en cualquier otro lugar de Europa (40%), pero siete de cada diez (71%) están preocupados por la insuficiencia de puntos de recarga. Los datos de ACEA sugieren que, en 2019, menos de 5.500 ubicaciones de carga atendían a una población de más de 46 millones. Por el contrario, Noruega, que tiene la mayor presencia de automóviles eléctricos en Europa por población, tiene 12.000 puntos para atender a una población de 5,5 millones.
¿Qué motiva las compras de coche eléctrico?
En cuanto a las motivaciones, mientras que la mitad (51%) ve el medio ambiente como una razón para comprar un coche eléctrico, los europeos también creen que los vehículos tienen una serie de beneficios prácticos.Tres de cada diez (31%) mencionan menores costos de mantenimiento, carga, seguro y otros, una cuarta parte (27%) aprecia las ventajas fiscales de comprar un automóvil eléctrico y el 11% cree que presentan una buena relación calidad-precio. Con el 29% de acuerdo en que la garantía de futuro es una razón para comprar estos vehículos, algunos también parecen creer que el mercado automotriz tiende hacia los automóviles eléctricos y se aleja de la gasolina / diésel.
Nuestro estudio también indica que quien percibe realmente estos estos beneficios son los propietarios de automóviles eléctricos. De aquellos que tienen un automóvil eléctrico (y no un híbrido), el 84% está satisfecho y casi la mitad (49%) dice que el mantenimiento es más barato y menos complicado. En general, el 46% piensa que presentan una buena relación calidad-precio en comparación con el 11% de los europeos en general, mientras que es más probable que los propietarios (37%) vean las ventajas fiscales que el público en general (27%).
Nuestros datos muestran que las razones que dan los europeos para comprar automóviles eléctricos y las razones por las que los propietarios de automóviles eléctricos están satisfechos a menudo se superponen, lo que sugiere que se podría hacer más para comunicar estas ventajas percibidas. Sin embargo, si bien el panorama general en todo el continente es un equilibrio entre beneficios y barreras, hay un panorama mucho más matizado dentro de cada mercado que los fabricantes deben comprender para llevar los vehículos eléctricos de la marginalidad a la corriente principal.